Para transformar el recibidor, lo primero que quería era quitar el color salmón que lo volvía tan oscuro por un color que diera más luz.
Utilicé un tono amarillo claro de la marca «IberColor» de Ibersa.
Como es una pintura que cubre muy bien y agarra en cualquier superficie, solamente tuve que dar una capa para que las paredes quedaran totalmente uniformes. Incluso pinté una caja del mismo tono para tapar las cajas de la luz, que le daban a la pared un aspecto un poco decadente (en el post como tapar las cajas de la luz os lo explico paso a paso).
El mueble que había antes no me gustaba nada, así que lo renové dándole un toque oriental, ya que era la idea que tenía para decorar el recibidor (En el post Renovar un mueble viejo dándole un toque oriental podéis ver el paso a paso).
También cambié la lámpara. Quité la anticuada lámpara de cristales por una de papel que, además de aportar un toque oriental, proyectaba una luz más uniforme.
Forré con vinilo blanco adhesivo un espejo grande de madera que tenía en el comedor, para ponerlo encima del mueble y darle al recibidor una mayor sensación de amplitud.
Y el paragüero, que antes era de color verde, con vinilo negro:
Por último, añadí otros elementos decorativos, como una balda con velas, jaula de madera con pájaros de corcho (que ya tenía en mi casa anterior), una orquídea, varios cuadros con motivos zen, etc.
Y al final, el resultado fue este:
Quedó «un pelín» mejor que el antes, ¿no?
Vaya cambio!! Enhorabuena, te ha quedado de revista! Tienes mucho gusto ^^
¡Gracias Silvia! ^_^
Me encanta como te ha quedado eres una artista.estoy deseando ver tu nuevo salon
Y yo de enseñároslo. Pero es que no he tenido tiempo de hacer la mitad de las cosas que tengo pensadas todavía :-(
5
4.5
Una lámpara de pie resultaría increíble. En este tipo de espacio de un hogar, este tipo de iluminación es el mejor. Consigue dar luz, pero no mucho, creando una atmósfera de bienvenida fenomenal.