Si me conoces, ya sabrás que soy muy aficionada a decorar mi casa gastando la mínima cantidad de dinero posible y, generando la mínima cantidad de residuos posibles.
Por eso, siempre que puedo, aplico la regla de las tres «R»: reduce, recicla, reutiliza.
En este caso, he reutilizado materiales de deshecho que tenía en casa para hacer dos nuevas macetas.
He usado como base dos botes de cacao en polvo, a los que les he ido pegando los recortes sobrantes de mi proyecto de hacer unas lunas en relieve para mi habitación. Pero se podría hacer con macarrones, fideos, lentejas… o cualquier otra cosa pequeña, con poco relieve.
El procedimiento no tiene ningún misterio: se van pegando las piezas sobre la base con cola blanca haciendo formas geométricas, y después se pinta la maceta.
El toque de «calidad» lo da el hecho de pintar la parte que tiene relieve un tono más oscuro que la base que hayamos usado para pintar la maceta.
Y en un momento tendremos unas macetas bonitas, baratas y sobre todo, sostenibles ;-)
Si tienes alguna duda, en mi canal de youtube puedes ver el vídeo completo del poceso ;-)
Un cambio sutil pero muy bonito en el hogar. Añadir una pequeña pieza como esta en tu casa puede cambiar un entorno por completo, y más si lo acompañas con la iluminación adecuada. La luz artificial de una casa es más importante de lo que se cree. Si la combinas bien, conseguirás resultados increíbles.